"Me he tragado todas mis pastillas. Pronto moriré. Adiós". Está bien esto de las redes sociales. Invitas a "amigos" a unirse a tu rollo, a esa página web que adornas con tus fotos con la Torre Eiffel al fondo o en esa playa paradisíaca. La mayor parte de las veces eres tan simple que crees que por tener un fondo exótico eres un tipo especial aunque sólo hayas salido una vez de tu pueblo. Así que consigues una red de "amigos" en Internet pero ¿cuántos tienes en la vida real? A veces tienes más de 1.000 en Facebook, como Simone Back de Brighton (Inglaterra), 42 años, que el día de Navidad anuncia su suicidio a esos 1.000 amigos en Internet. A partir de ese momento, a los 7 minutos exactamente ¿qué pensáis que ocurre? ¿Que llegan los equipos de emergencia a su casa? Ilusos... Ocurre que comienza una discusión virtual entre sus amigos sobre si va en serio el tema o son exageraciones. Algunos la tratan de mentirosa y exagerada. Otros la tratan con crueldad sarcástica. Ni siquiera quienes viven cerca de su domicilio se preocupan. Vista desde fuera era una persona popular, poca gente interactúa con otras 1.000 personas ni aún en la red. Pero ¿puede haber alguien más solo? Así que preguntaos qué cojones estamos haciendo en pleno siglo XXI.
Hay demasiada gente que vive vidas virtuales rodeados de amigos virtuales. Gente cuya realidad es una pura frustración y sólo puede sentirse alguien en función de una pantalla en la que pueden inventar una existencia a su medida, la que les gustaría que hubiera sido. Facebook, en muchos casos, no es más que una vía de escape de un mundo que no nos gusta a otro hecho de diseño. Es triste, sí, pero para muchas personas es la única forma de encontrar una evasión de todo lo sucio, malo y feo que los rodea. O será que me ha dado el día compasivo.
ResponderEliminarSe ha conformado una sociedad de demasiada gente y pocas personas. Una puta mierda, vamos.
ResponderEliminarLa palabra amistad nunca ha estado más devaluada, porque devaluación es creer que alguien puede tener 1000, 100 ó 50 AMIGOS.
Al que antaño se denominaba conocido ahora se le llama amigo, todo muy superficial, muy barato sentimentalmente. No se si ello responde a lo inane, en el sentido espiritual y sentimental, del mundo que nos rodea, lo cual nos empuja a agarrarnos a la tenencia de amistades virtuales, falsas. El autoengaño como huida de nuestra propia realidad. Muy de nuestro tiempo en múltiples cuestiones.
PD: Perdona, Íñigo, quizás este comentario ha resultado un tanto sombrío, pero es que el paisaje global es un tanto deprimente, no te parece? El caso del post, sin llegar a ese extremo, creo que es muchísimo más común de lo que pueda parecer.
Un abrazo.
Al fin acabaron las navidades!!!!
Fran.- Gracias por pasarte por aquí. Es verdad lo que dices, pero abundando en la idea un poco más, no sólo es Facebook sino toda relación que establecemos sin contenido humano y real. Y gran parte de culpa la tiene el temor que tenemos a encontrarnos con otra persona cara a cara, quizás porque todavía no estamos contentos con nosotros mismos. Sospechamos de quien se acerca a nosotros. No tenemos tiempo para una conversación y relegamos todo eso a encuentros virtuales.
ResponderEliminarMiguel.- ¿Bien las Navidades? ¿Has cantado villancicos o sólo has tocado la zambomba? Tienes razón pero tampoco pintemos el panorama tan sombrío; quiero pensar que cuando uno se acerca a la gente, es bienvenido. Estoy convencido de que si te aproximas a las personas, por regla general, nos podemos llevar gratas sorpresas. Estoy seguro de que hay un montón de gente interesante por ahí que sólo esperan una buena conversación... precisamente ¿la soledad de Internet no hará más fácil las relaciones reales? ¿No hace que sea más patente la necesidad del dialogar delante de un café? Incluso hay gente que está muy acompañada (familia, vida social, ...) y con vidas aparentemente felices y completas que cuando arañas la superficie, te sorprende...
ResponderEliminarEs verdaderamente atroz la noticia y la reacción de sus "amigo" virtuales. Supongo que muchas circunstancias hacen que a veces ocurran estas cosas. A veces no es solo la soledad sino problemas o enfermedades más profundas que se unen a ella, y la Navidad no es buena época para mantenerse vivo en mitad de esa exaltación del amor filial. En cualquier caso opino como tu Iñigo a menudo uno encuentra si se lo propone y vence su timidez o se obliga a relacionarse, personas receptivas a las que les gusta darse y relacionarse. Me permito citar unas líneas de la brillante y luminosa obra que recomiendas en tu post anterior que relaciono con éste que nos ocupa."Despojar el presente de su realidad entrañaba ciertos riesgos. Resultaba fácil desentenderse de las posibilidades de hacer algo positivo en el campo y esas oportunidades existian de verdad. Ese ver nuestra "exsitencia provisional" como algo irreal constituía un factor importante en el hecho de que los prisioneros perdieran su dominio de la vida, en cierto sentido todo parecería sin objeto. Tales personas olvidaban que muchas veces es precisamente una situación externa excepcionalmente difícil lo que da al hombre la oportunidad de crecer espiritualmente más allá de sí mismo. ... no toman su vida en serio y la desdeñan como algo inconsecuente. Prefieren cerrar los ojos y vivir en el pasado. Para estar personas la vida no tiene ningún sentido.
ResponderEliminarSupongo que eso le ocurrió no pudo tomarse la vida en serio, perdió el dominio de la vida, y los internautas no la tomaron en serio. Aunque entiendo que no siempre se puede soportar tanto dolor y sinsentido,no todos somos capaces de dominar nuestra vida.
Iñigo me faltan pocas páginas para terminar El hombre en busca de sentido y quiero agradecerte la recomendación, verdaderamente es iluminador,y curiosamente aunque ninguno de nosotros haya sufrido la experiencia de vivir en un campo de concentración en su páginas muchos podemos encontrar sentimientos o sensaciones paralelas. Es magistral como el autor logra relatarnos su día a día desde la perspectiva del tiempo solo para curar para hacer un análisis de nuestra posibilidad de elegir cómo se vive cualquier circunstancia vital. No era fácil hablar siendo protagonista sin odio sin sensibleria, sin caer en el rencor. Magistral.
Arqui.- También es verdad que todos somos diferentes y reaccionamos de forma distinta pero Frankl valoraba el sufrimiento emocional como una parte normal de la vida del hombre, con la condición de que nos empuje a encontrar respuesta, quizás toda enfermedad provenga de ahí, pero al menos debemos intentar dotarnos de armas para afrontar los momentos jodidos, estar filosóficamente alerta, encontrarnos a nosotros mismos para poder salir ahí afuera con fuerza, no buscar en otros lo que ya llevamos dentro (parejas rutinarias o partidos de fútbol, da igual). Y para eso hay que ser honrado con uno mismo (y valiente), no rodearnos de amigos virtuales o de cosas materiales o de falsos amigos destructivos. Cuánta gente prefiere que le humillen o estar en un sin vivir a verse sola (especialmente en temas de pareja), y eso es vergonzoso. Busca la soledad, encuéntrate primero y crece después. Me alegra que te haya gustado Frankl, es un gran libro. No creo que sea para todo el mundo, pero seguro que sabes de gente a tu alrededor que le puede hacer un gran bien, regálalo, da a conocerlo...
ResponderEliminarA mi me parece que el gran problema de finales del siglo XX y del XXI, es la soledad, sobre todo en las ciudades. Demasiado stress, demasiado tiempo en los trabajos, demasiado poco tiempo para una tranquila tertulia o un relajante paseo, demasiado poco tiempo para leer, demasiadas prisas, demasiado consumo, demasiada depresión, demasiados ataques de pánico y de ansiedad, demasiadas pastillas, demasiado alcohol y demasiadas noticias en tropel que ni te da tiempo a poder asimilarlas, noticias terribles que nos hacen ver cada día mas natural el asesinato, la muerte el suicidio, las violaciones, la violencia.
ResponderEliminarY no nos olvidemos que ahora en el corte inglés en agosto es navidad y en enero primavera- verano...
Y todo eso y muchas más cosas que me he dejado en el tintero, las metes en una coctelera, las agitas con saña y sale un coctel explosivo de egoísmo y soledad. Para mi es simplemente eso y por eso yo cuido a mis amigos, les llamo, les veo a menudo, viajo con ellos cada vez que puedo escaparme y disfruto en cualquier bar de cualquier ciudad del mundo tomándome un simple café, bueno un simple té porque yo no tomo café y un cigarrillo porque a pesar de que es pecado y de que te pueden denunciar anónimamente, a mi me gusta fumaaaaaar
Blondie
http://eldivandelloko.blogspot.com/
Blondie.- Tienes razón. Y para luchar contra eso, como decía Sócrates (o se le atribuye) "no hay que dejar crecer la hierba en el camino de la amistad". Lo que tú haces, llamar a amigos, felicitarlos oportunamente, estar cerca de alguna manera. LO que pasa es que en este mundo vertiginoso pensamos que no tenemos tiempo ni para eso, cuando realmente es una de las pocas cosas importantes. Y también hay otro gran drama: la soledad acompañada, ¿cuánta gente aparentemente con una vida en compañía , llena y feliz, no está satisfecha? Si estás solo , ya lo sabes y puedes remediarlo, pero si estás solo estando acompañado, tienes un problema muy , muy jodido. Besos.
ResponderEliminar¡ este barco es bueno amigooo ,como navegaaa, !¡como no va a serlo con esa magnifica tripulación que va en el! ,(todos esos tripulantes que has puesto ahí en el Downshifting,)además su Capitán no es un capitán cualquiera no,es un Capitán de altura, que lleva firmemente el timón y el rumbo ¿ a donde nos dirigimos? ,ni puta idea ¡a un capitán no se le pregunta eso,marinero! , uno tiene que confiar plenamente en el, aunque vaya su vida en ello !lo importante es la travesía ,y que esta sea interesante y si hay que morir en ella ,se muere,¡con dos cojones!, Pero no te fíes Capitán, un viejo marinero como yo de nombre JOHN SILVER, con pata de palo y parche en el ojo, que a luchado en tantas batallas ,lleva en su sangre el instinto de la insumisión,de la rebeldia y de incitar a un motín a bordo , pero no temas capitán ,el cuento siempre acaba igual , el Capitán dados sus grandes dotes consigue reducir facilmente al viejo pirata y hacerse otra vez con la tripulación y el timón,indultado el viejo pirata, este vuelve a aportar sus grandes dotes de marinería......No hay amigo que en un momento dado no pueda traicionarte,igual que tu a el , pues las circustancias en la vida aveces nos vuelven miserables y sobre todo pobres interiormente ,por lo tanto si eres pobre interiormente te sentirás mal y no podrás ser amigo ,solo un lamentable y frustrado intento de serlo, somos ``niños chicos´'' que utilizamos la palabra ''amigooo ''de una manera muy superficial, con el mínimo grado de compromiso ,egoistamente y pobremente, no puede haber amistad entre un grupo de gente que estén frustrados ,estresados, abatidos ,cansados,malhumorados ,o aburridos, ¿que coño van a compartir ,sus pobres dolores anímicos, ? ¡nadie quiere compartir esa basura! ,mejor huir así de la manada a buscarse a la montaña y madurar o vivir en soledad ,¡ para ser amigo hay que valer y es lo mejor del mundo!, cuando sientes una sonrrisa sincera al ver a un amigo o a tu vecino o a la cajera del super, es ya la rehostia ,ser amigo es solo una actitud y esta solo la expresión de sentirte bien ... soy el lamentable perro de diogenes ,guau, porque crear cualquier identidad es solo un pobre y miserable acto de vanidad ..ojala me muerda hoy un ROTTWEILER y me arranque la cabeza...
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