Camina entre la multitud, entre niños alegres de heladería y escaparates brillantes de regalos. Ha llegado la nueva colección de Swarovski. Camina delante de pósters de chicas en bañador de la tienda de lencería, delante de las parejas excitadas de verano. Hay ofertas de vuelos a Nueva York. El camina solo. Le falta un zapato. Le falta una mano. Le falta todo. Tiene más de setenta años y se ha meado encima como un niño. Apesta. La gente se aparta sin mirarle siquiera; hemos desarrollado un sexto sentido para evitar lo oscuro, lo ajeno. Asusta con sus ojos azules de loco inocente. Le adelanto con mi bici. Al pasar a su lado veo que tiene los ojos arrasados en lágrimas y gimotea una sola palabra lastimeramente una y otra vez: ¡ Mamá... mamá !
Está llamando a su madre.
Ojalá algún dios permita que en otra vida puedas acariciar a tu madre. Y con tus dos manos.
Está llamando a su madre.
Ojalá algún dios permita que en otra vida puedas acariciar a tu madre. Y con tus dos manos.
Blanco radiante y elegante, veranito dios mediante. ¡qué tendrán las madres que ni la sin razón te priva de raciocinio para llamar a gritos al primer amor! alimentación, cuidado, cariño, protección cuando uno fue y sigue siendo desvalido o el reclamo de eso tan necesario que todos nos niegan y que uno espera que una madre nunca lo haga AMOR. y digo yo qué papel tenemos entonces los padres en la educación sentimental del mundo? FELIZ Y LUMINOSO VERANO amigo Iñigo, tanto si follas te echas nuevos amigos, o disfrutas con los de siempre, o si decides seguir contándonos con las dos manos y ambos ojos lo que sucede a tu alrededor y que haces nuestro. Amén.
ResponderEliminarFeliz verano, compañero Arqui. Fíjate cómo en muchas memorias y diarios de la II Guerra Mundial (soy un fanático de ella) muchos hombres mueren llorando como niños y pensando en su madre. ¿En quién si no? Me llenó de congoja el oír a ese pobre hombre llamar a la suya hace algún tiempo en BCN. Quizás más allá de la simple pena, no deja de ser una metáfora de que todos estamos más o menos solos ante el desamparo y la Muerte.... ay, ay.. que me voy... que eso, feliz verano, amigo.
ResponderEliminarY de contar y contar en el corazón de la tormenta mira tu por donde has conseguido que esta tarde, sin conocerte, me haya acordado de ti, cuandop me he cruzado en la calle con un señor mayor, con la mirada perdida y los pantaloneos meados. Esto es verídico y lo primero que a venido a mi mente ha sido tu escrito...
ResponderEliminarAsi que ya ves que lo que hace cualquiera de nosotros en la vida tiene su importancia y está encadenado...Y eso es lo que me ha sucedido a mi con tu escrito, ya ves...
Blondie
Blondie.- Grandes casualidades o pequeños milagros como yo las llamo. Impresiona ver en ocasiones lo desvalido en cuerpo y alma que puede llegar a estar un hombre. Cuántas preocupaciones absurdss tenemos nosotros cuando hay personas así.... Un saludo.
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