Todos los grandes sistemas que se pensaban eternos y en posesión de la verdad más inamovible y absoluta han acabado yéndose majestuosa, sistemática, inevitable y deliciosamente a tomar por el culo. La cultura egipcia, el Imperio Romano, el absolutismo y el Tercer Reich entre decenas o cientos de otras propuestas, sistemas, teorías, creencias, ideologías, costumbres y supersticiones. Y ahora, a ti, te da miedo el hacer un pequeño cambio en tu vida. Un cambio minúsculo, ridículo en la corriente de la historia. Precisamente la esencia de estar vivos es estar en cambio constante, entre otras cosas porque el cambio es inevitable al igual que los días pasan al ritmo de las estaciones. Las "crisis sistemáticas", los ciclos no son sino la verdad de la Vida. Podemos asustarnos ante ellas, analizarlas, criticarlas, ignorarlas pero al final, si estás vivo, te alcanzan y entonces has de decidir sumergirte en ellas con naturalidad... o pelear contra ese cambio que la vida te propone , luchar infantilmente porque es una pelea perdida de antemano. ¿No es mejor aceptar el cambio y disfrutarlo de alguna manera? Vivimos en nuestro paradigma psicológico que nos impide avanzar y encima nos engaña pensando que esa es "nuestra verdad", nuestra cómoda verdad moral o mental. Nuestra cobarde verdad, y por demás, peligrosa, inútil y paralizadora la mayor parte de las veces. Gran parte de ese paradigma psicológico que arrastramos y del que estamos orgullosos de poseer, no son más que costumbres aprendidas, nada emocionantes, burguesas en el sentido filosófico, prestadas y aburridas. Nos estabilizamos en una zona cómoda. Mortalmente cómoda. Si alguien viste de forma estrafalaria, nos reímos. Si alguien ayuda a otro de forma desinteresada, alberga intereses ocultos. Si alguien se acerca sin conocernos, hay que estar alerta. Si nos desvinculáramos de ese bagaje absurdo de temor al cambio e ideas preconcebidas, mañana al despertar nuestra vida sería tremendamente excitante. Posiblemente, entraríamos en una zona desconocida, a veces peligrosa, inquietante pero llena de pulso vital e ideas no preconcebidas. Pero habríamos dejado de autoengañarnos hasta la muerte. Además seguro que estás deseando comprarte esa camisa tan llamativa o pedir a tu compañero/a sexual probar eso que tanto te molaría experimentar... pues hazlo, el mundo no se va a detener por eso.
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Las personas más interesantes que conozco han hecho cambios radicales en su vida, algunos difíciles, otros impuestos desde las circunstancias y otros buscados pero tienen una característica común: han aceptado enfrentarse al cambio, mirarlo de frente para seguir con su vida, para ser más ellos. Personas que han luchado contra unas circunstancias que las llevaban a estar muertas en vida, y han aceptado el cambio para vivir una vida elegida, libre, no impuesta y anuladora. Va por ellos.
* Ideograma chino que significa tanto "crisis" como "oportunidad" (Wei ji).
me ha encantado este post, incluida la foto elegida para ilustrarlo, quizá algun dia será uno de ellos a los que se lo dedicas mientras disfruto con el pensamiento crítico y la no acción, gracias por recordarnos siempre que crisis es oportunidad, lo haces desde la felicidad de haber optado y eso algún dia penetrará contagiará.
ResponderEliminarTodo eso de aceptar el inherente, constante e inevitable cambio al que está sujeto nuestro devenir(Heráclito dixit) está muy bien y creo que es un hecho ampliamnete aceptado, aunque muchas veces joda. Lo de la valentía, el triunfo de la voluntad sobre la vida alienada etc, es un tema mas peleagudo. Lo que yo creo es que el tema de la elección (del modelo de vida) es una noción tan burguesa como su praxis. Gente adinerada y con contactos que decide replantearse su vida, hacer un viajecito al tercer mundo para airearse y volver a empezar en otro negocio, tal vez en otra residencia. La vida real es mucho menos interesante, contratos basura eventuales, facturas impagadas, vivir en el domicilio familiar por falta de ingresos para la emancipación etc. Vamos que no es tan fácil. En fin, que es cuestión de clase (la posibilidad de elección) y hasta que la igualdad de oportunidades y el reparto de riqueza no sea más visible lo del triunfo de la voluntad es una charlatineria de los pudientes que se hacen así los interesantes y de paso enmarcan en filosofía libertaria sus privilegios.
ResponderEliminarUn abrazo. Stalker.
Bueno, creo que optar, optamos cada día todos porque nuestra actitud es la libertad irrenunciable que nada ni nadie nos puede quitar. Todos optamos, desde que nos levantamos, optamos entre luchar o arrojar la toalla, dejarnos sorprender o dejarnos llevar, desear que llegue la noche o vivir con ilusión cada instante.
ResponderEliminarAmigo Stalker.- Creo que hay cambios mucho más importantes que los materiales. No me refiero en el post a temas laborales ni económicos ni a estilos de vida más "fashion". Me refiero sobre todo a esos cambios mentales que aparentemente no se ven pero que hacen de nosotros nuevas personas a la hora de mirar el mundo. Esos cambios imperceptibles pero profundos. Fíjate los ejemplos del post: llevar la ropa que te da la gana, o experimentar un trío regado de Jack Daniels si es lo que te apetece.. je. O subir ese monte en soledad en medio de la lluvia . O tratar mejor a la gente que tienes cerca, empezando por saldar las deudas del alma con quién sabe con quien... Todo forma parte de no asustarse de uno mismo, no tiene que ver con la política ni los capitalistas malos , malotes. Yo la etapa de lo
ResponderEliminarmalos que son los ricos nunca la he tenido .... quizás porque nunca he esperado demasiado del ser humano en su conjunto. Sí individualmente. Y ahí es donde está el cambio , en la mente de las personas, no en su tipo de contrato o en la pasta que tengan. Aunque también hay gente que en el plano laboral renuncia a ciertos emolumentos para llevar una vida más suya. Más que cambiar es experimentar el cambio en la vida de uno.
esto es un aviso solicitud me ha llegado por las ondas de la SER que mi admirado Millás, (sobre todo como entrevistador/articulista), no sé si tuyo, andará de tertulia en Pamplona esta mismísima noche, si por casualidad vas, cuéntanoslo por aquí, si pudiera me acercaría pero me pilla un pelin trasmano. Gracias y perdón por el atrevimiento, me parezco a las viejas radios peticiones del oyente. Saludicos
ResponderEliminarAh! hablando de la Ser, enlazo con Sáhara, eso si es una crisis solo que lleva años siendo crisis y nunca se convierte en oportunidad.
Arqui.- No pude ir pero mil gracias por tu recomendación. Suelo leer sus artículos y me gustan especialmente por ese punto cínico con los que los adereza. Lo ví hace años en una conferencia junto a Jesús Ferrero (un tipo al que estaría horas oyéndolo hablar, te atrapa) y estuvieron muy majetes ambos. En un momento alguien del público se puso pesado con sus argumentos sobre no sé qué a la hora de las intervenciones del público y le dice Millás : "Es igual señora, hoy nos hemos juntado para hablar sobre esto pero si quiere defiendo la postura contraria ahora mismo..." jaja, me descojoné....
ResponderEliminariñigo recuerdos de candelario´´salamanca´´ me sorprendiste una noche ¿RARA?y aun me sigues sorprendiendo de esto ya hace dos años .me alegra saber que existes todabia me intriga saber como te lo montas pero me sigue alegrando saludos y rocessss ´´chao´´
ResponderEliminar¡Qué sorpresa! En este enero se cumplen dos años de aquella noche "rara" y especial. Me he llevado una alegría al ver que lees este blog. Recuerdo ese viaje por media España que me llevó a Candelario (recuerdo el ruido en la madrugada de los riachuelos que recorren las calles) , hice miles de kilómetros a la aventura durante unos cuantos días. Me lancé a las carreteras secundarias de España y vi sitios preciosos y gente especial. Fue como un retiro espiritual haciendo kilómetros y parando aquí y allá, sin itinerario fijo. Una gran experiencia... Espero que te encuentres bien. Aquí tienes tu blog para lo que quieras. ... Un abrazo.
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